Encaramos esta primera experiencia con humildad, dándole a la participación institucional el papel que realmente tienen para los comunistas: El de altavoz para denunciar las injusticias del sistema capitalista y la dictadura de los empresarios y banqueros.
Para nuestro partido la participación en los ayuntamientos debe traducirse en una posición de apoyo para la lucha de la clase obrera y los sectores populares. Nuestros concejales deben jugar un papel activo en conocer las problemáticas de los diferentes colectivos de trabajadores de la ciudad, así como las problemáticas de las vecinas y vecinos. Pero sobre todo deben servir de espaldarazo para acelerar la necesaria reconstitución del partido de la clase obrera, facilitando la llegada de nuestras posiciones políticas de lucha democrática y socialista a las masas.
Enfrentamos esta experiencia como un proceso de aprendizaje en un ámbito que no es el nuestro. Aspiramos a que esta legislatura nos sirva para acumular conocimientos y experiencias que nos permitan perfeccionar nuestro método de trabajo, extrayendo el máximo potencial a nuestra participación institucional a la vez que nos prevenga de los principales riesgos de esta práctica que ya sufrieron otros partidos obreros y comunistas a lo largo del siglo XX.
Nuestro partido va avanzando en su construcción paso a paso. Sin grandes extravagancias ni aspiraciones arrogantes. Mostrando el reflejo del actual estado de conciencia de nuestra clase y trabajando, junto con ella, para organizarla y educarla en la necesidad de luchar por construir una nueva sociedad.
